martes, 20 de diciembre de 2011

El exorcista (William Friedkin, 1973)


"Magnifico día para un exorcismo"


Cada vez que veo en el periódico o en el telediario imágenes o videos de horrores, ahí, expuestos al mundo para que si alguien no lo ha visto y se a levantado con el animo de levantar su vida y su moral de alguna manera, se pueda ver en su mente en una  mini reproducción  a 20 fotogramas por minuto en imágenes subliminales la cara del demonio vagando por su mente. En busca de señales de maldad y de protagonismo. No le vale con estar presente en las grandes guerras y en catástrofes, sino que le vemos cada vez mas recorriendo el día a día con nosotros. Sobre todo en películas malditas como esta.

Estaban seguros de que el film esta endemoniado.  Se pensó en llamar a un sacerdote para dar su bendición ya que una serie de catástrofes retrasaron el rodaje por lo menos 2 meses, hubo extraños incendios en los sets del rodaje, se velaron rollos de películas sin motivo aparente, accidentes graves de trabajo, incluso unas 9 muertes relacionas directa o indirectamente con la producción de la película no pudieron acabar con la filmación de El exorcista. Por no hablar del día del estreno en 1973 en Estados Unidos, una gran aceptación ante el publico propició unas colas kilométricas para ver la película, desmayos, ataques de nervios, mareos, ambulancias en las puertas del cine (también como reclamo publicitario), gente vomitando en la sala incluso abortos agrandan esa gran lista de mitos de una película que es sin duda la mejor película de terror de su época. Por la niña del exorcista. Por el Tubular Bells  de Mike Oldfield escalofriante e inolvidable.  Por lo polémica que fue.  Por esas imágenes subliminales muy bien utilizadas de la cara del demonio. Hoy por hoy aun me recorren verdaderos escalofríos y se me para el corazón como unos 5 segundos antes de fotografiar en mi mente esa cara. Después parpadeo y respiro, pero no me lo quito de la cabeza, aun esta ese fotograma de la cara del diablo en mi mente. Muy bien utilizadas como digo.
 
Y por que queramos darnos cuenta o no, el demonio esta con nosotros en el día a día, recorriendo con nosotros un camino real y oscuro entre las tinieblas. Así fue la vida de Robbie Mannheim, la historia real que inspiro la novela, su relato es terrorífico.  Una muestra del puro horror.  Me gustaría contaros su historia pero no quiero destriparos la película ni la novela ni desviarme demasiado del verdadero objetivo de este Blog. Solo contaros que la familia de Robbie Mannheim quería olvidar lo sucedido cuanto antes pero el escritor de la novela, William Peter Blatty, estaba empeñado en que seria un bombazo y su vida después de la novela iba a cambiar enormemente.  Y mira si cambio. Se forro. Aposto por ella corriendo un gran riesgo y gano. Solo que en la novela  tubo que hacer unos cambios y darla un aire ficticio para no molestar demasiado a la familia de Robbie. En vez de que el protagonista de la historia fuera un chico, puso a una chica que en el cine fue interpretada fenomenalmente por Linda Blair.

La actriz Linda Blair fue escogida, entre numerosas chicas y aparte de una muy buena prueba, por dos frases que pronunció en el casting. Solo dos frases. Una la dijo en referencia del argumento en la que se podía ver su madurez, la otra fue en referencia a la escena de la masturbación con el crucifijo. Al preguntarla sobre el concepto de la masturbación, Blair contesto: “Claro que entiendo lo que significa masturbación. Yo lo hago. ¿Usted no? Bueno, consiguió el papel ipso facto.

El color de un bello ángel  es el color más puro que existe. Lleno de sabiduría y el  sello de una gran obra maestra. Así era el ángel más hermoso de todos los que creo Dios. Ángel protector de las alabanzas y el mejor posicionado ante Dios. Su mano derecha. Su consejero. El portador de la luz. Lucifer se hacia llamar. Y llenándose de envidia y de violencia dijo: “Al cielo subiré y por encima de las estrellas de Dios alzare mi trono. Subiré a las alturas del nublado y así seré como el altísimo”. Aquí comenzó la caída del bello ángel para convertirse en el portador de la oscuridad y la maldad. Una sombra de Dios que encumbra horror y sus actos propiciaron la caída del cielo del Diablo. Un espíritu impuro y endemoniado sin ánimo de conversar. Para el diablo no existen diálogos. No cree en el crecimiento humano ni en la ayuda del corazón por muy ángel que hubiese sido en un principio. Solo cree en mentiras y oscuras tinieblas. Es un espía errante y perdido de Dios en la tierra. Se alimenta a base de miedo. Cuanto más posee mas quiere. Su propio nombre ya incita al pecado y sus ojos al suicidio. El príncipe de las tinieblas. Satanás. Calamidad de vida la tuya que evocas a la maldad y al engaño para empequeñecer aun mas con tus actos tu propia vida. Unidos como una Legión de ángeles querubines derrotaremos al señor de las moscas, amo de las serpientes y escorpiones. Negro corazón el tuyo que haces mas larga y  amarga tu existencia y tu final. Señor escucha estas plegarias y concede a este humilde siervo el perdón de todos sus pecados y la fuerza necesaria para enfrentarse a este cruel demonio. No me cansare y conservare las fuerzas suficientes  para levantarme. Ninguna sombra tapara de luz mi mente ni la desesperación del diablo hará mella en mí. Mi mente perdura fuerte como un roble y en menos tiempo débil como el papel. Pero nunca, nunca te permanecerá. Al menos entre semana. :)


miércoles, 14 de diciembre de 2011

E.T. El Extraterrestre (Steven Spielberg, 1982)


"Estaré aquí mismo"

Por mucho que sueñe en estar ahí arriba no pararía en pensar en estar ahí abajo. Ley básica humana de añoranza a lo querido. Tu vida, durante muchos, muchos años envejece más rápido ahí arriba. Tu tiempo es el que tienes, no hay más, muy escaso pero lo más valioso. Aprovecha cada bocanada de aire, cada instante, cada emoción. Un tiempo precioso para ser robado en un segundo por un contacto extraterrestre, ahora todo tu tiempo cambia. Lento, muy lento. Todo lo que está a tu alrededor pasa muy despacio. Apenas notas el movimiento y tus bocanadas de aire te ahogan

Cuando se avista un OVNI se considera que es la primera fase. Si se descubren evidencias se habla de la segunda fase. Si se produce algún contacto directo con extraterrestres se habla de la tercera fase. El último nivel, la cuarta fase es la abducción, el secuestro de humanos en contra de su voluntad para la realización de análisis y experimentos. En el 1972, el astrónomo y ufólogo Josef Allense estableció este protocolo que clasifica los cuatro tipos de encuentros básicos que ocurren entre humanos y extraterrestres. Avistamiento. Evidencia. Contacto. Abducción.  

Quizás sea la película mejor hecha y perfecta de Spielberg la primera con su productora Amblin Entertainment, por eso su logo es la silueta de Elliot y E.T. en la bici con esa inmensa luna azul preciosa detrás. Luego fundo Dream Works entonces recorto la luna un poco en creciente iluminada y puso a un niño sentado en la punta de abajo pescando sueños. La luna como objeto de sueños, un logotipo como creador de esperanzas e ilusiones. Con lo cual fue ganadora de cuatro Oscar de las nueve a las que estaba nominado. Un gran resultado pensando en todas sus buenas y merecedoras competidoras. En el 1982 Spielberg fue condecorado gracias a esta película con la medalla de la Paz de la ONU y el largometraje fue proyectado en la sede central de la Naciones Unidas por el sabor de sus emociones.

Esta historia, el propio Spielberg, la bautizo como esencialmente una autobiografía espiritual porque aunque nos quería hacer ver que el tema central de la historia se basa en una historia de amistad entre dos seres, no quería reflejar más que la situación emocional de los niños frente al divorcio de sus padres. Y eso Spielberg lo vivió muy cerca y obtuvo esta gran historia gracias al divorcio de sus padres y a su amigo imaginario que creo en aquel estado afectivo infantil. Su compañero imaginario fiel y la separación de sus padres propicio una historia sensacional que permanecería en su mente hasta que en el 1981 la realizo. El siguió con su sueño hasta conseguirlo. Recuerden, creador de sueños y esperanzas. Y la hizo pese a muchas oponencias y frente a numerosas denuncias por plagio de gente como un productor de Alien que aseguro que el guion fue plagiado en el 1967 y del dibujante barcelonés de comic Joaquín Blázquez que intento demostrar desde el estreno de E.T. que fue un plagio de Melvin, un personaje que creo siete años atrás para una publicación estadounidense.

Yo cuando vi la película de niño, se me quedo grabada en la memoria otra escena que no es esta y cuando revisione la película hace unos días la recordé intacta, tal cual era, incluso las emociones que sentí puedo decir que fueron las mismas. Elliot a sabiendas de que ni su madre, ni su hermano le creen, él sabe que hay algo fuera de la casa. Sale de casa a recoger una pizza jugando con su guante de beisbol y una pelota. Afuera no se oye más que los molestos ruidos de insectos nocturnos pero algo suena en el cobertizo. Se acerca pausado. Indeciso. La noche es fría y una espesa y fina capa de niebla hace que la luz de una bombilla en el cobertizo de madera resplandezca de claridad entre la oscura noche. Entre la luz de la neblina del cobertizo escucha otro ruido dentro. Se acerca temeroso, aterrorizado pero con valentía. Su cerebro le dice: Elliot, estás loco!!, pero sus piernas dicen lo contrario. A unos dos metros del cobertizo se para y traga saliva, respira hondo y una idea le hace una chasquido en su cerebro. Coje la pelota y la tira dando un par de botes dentro del iluminado pero a su vez sombrío cobertizo a través de la puerta. Traga saliva otra vez y los ojos abiertos de par en par no pueden creer lo que ven. La pelota vuelve a él a ras del suelo con la fuerza básica de un empujón desde dentro del cobertizo. Ahora si estaba seguro. Ahí dentro hay algo.

Tal cual lo cuento, tal cual lo recordaba de pequeño. Aun siento las mismas emociones y los pelos de punta cuando veo esa escena. Hay cosas que perduraran para siempre en mi subconsciente. Cosas que sacaran mis sensaciones a través de movimientos, gestos o palabras. Por más que quiera remediarlo y ocultarlo están ahí, curiosas por salir e intranquilas por recorrer mi cuerpo y mis nervios. Me enmudecen y me hacen sudar muchas veces. No os engañéis. Impaciente estoy yo también de sentirlo una y otra vez. Deseoso estoy  de esa adicción al saber, al fin, que la sensación de que recorra por mi cuerpo la emoción para mi es la mejor abducción. 

viernes, 9 de diciembre de 2011

Alien, el octavo pasajero (Ridley Scott, 1979)


"En el espacio nadie escucha tus gritos"

Se conoce muy poco acerca del universo, aparte de la enorme belleza de las galaxias, los planetas, estrellas y constelaciones de estrellas, solo hay una cosa en su inmensidad que te puede poseer y es la soledad a la que estas expuesto que junto con la oscuridad del espacio es capaz de disfrutar de cada centímetro de tu piel y tu ni te das cuenta, lo único que tienes es una cara de pánico y de temor al pensar que por cualquier error puedes estar vagando durante mucho tiempo sobre ese manto negro y solitario. Por muy abierto que este el universo, la claustrofobia disfruta de ti.

Dentro de la nave Nostromo, ya es otra cosa. Disfrutas de casi todas las comodidades. Totalmente automatizado. Generadores de gravedad artificial. Inteligencia artificial. Piloto automático. Cierre centralizado. Elevalunas eléctricos. Mechero. Y trajes de astronauta. Trajes espaciales de los cuales tuvieron más de un susto y algún desmayo, eran de nylon, gruesos y pesados y no tenían ningún sistema de refrigeración o ventilación en el que pudiera escapar el dióxido de carbono, eso combinado con una grandísima ola de calor debilitaba a los actores e hizo falta más de una enfermera con bombonas de oxígeno.

No sé si habréis visto la película Gremlins, de Joe Dante, sobre el pequeño Gizmo que tiene unos determinados cuidados, bueno pues cuesta creerlo pero Alien nació gracias al concepto Gremlin, que fue un mito en la segunda guerra mundial en que se pensaba que los Gremlins se metían en los aviones bombarderos y averiaban los motores pero no solo eso sino que mataban a la tripulación entera. Pensar que Alien es hijo de los Gremlins es igual que pensar que King Kong es mi hijo. Exagerada hipérbole sorprendente.
Pero también sorprendidos se quedaron el elenco de actores que participaron en esta escena al ver a ese Alien salir del pecho. Era secreto. Solo lo conocía el director y el actor. Un secreto sorprendente que se puede apreciar en la cara de los actores durante el rodaje, la verdadera realidad de la forma física del pánico y temor en tu cara. Así se curten los buenos actores y directores, con retos, técnicas e hipérboles sorpresas. La película le hizo grande al maestro Ridley Scott, una majestuosidad fílmica impecable de principio a fin. Es genial cuando te transmite el miedo y el agobio como es la de estar a merced de una criatura que devora humanos muy, muy lejos de la tierra, en un solitario infierno universal de espacio y tiempo muy distinto a lo que pensabas cuando eras un crio y querías ser astronauta.

Desde la creación del universo y  la existencia humana de creer y poder estar lo más cerca posible de las estrellas nos a atraído por la belleza del universo. Navegar entre satélites y buscando indicios de vida inteligente extraterrestre en algún punto de la galaxia. Y no estamos lejos de encontrarlo, cuando aquí abajo nuestros gobernantes escaseas de esa materia, ¿en algún lado tiene que estar la susodicha sustancia?

Un tamaño y una forma del universo observable que no conocemos y a veces nos asusta lo que no conocemos. Quizás creo poder estar en un cumulo de estrellas, polvo y planetas y no estoy más que una pequeñísima parte de una inmensidad universal inimaginable, en nuestra galaxia concreta, La Vía Láctea. Concretamente en el brazo de Orión donde se encuentra el sistema solar. Aquí estoy tranquilo. Nuestro sistema solar conocido. Me gusta moverme por entre los planetas, tocar un asteroide y  ver nacer una estrella. Por mucha soledad, miedo y pánico que nos de la inmensidad del universo, ella me encuentra a mí para que la siga. Me invita a recorrer sus largos brazos y me atrae. Nos atrae. Quizás encuentre mi sitio aquí, junto al Sol. Donde es de día siempre y jamás habrá oscuridad. Donde veo donde piso y disfruto de cada pisada.

Por mucho que piense aquí abajo me gustaría subir ahí arriba, pero por mucho que sueñe en estar ahí arriba no pararía de pensar en estar ahí abajo.

lunes, 5 de diciembre de 2011

La naranja mecánica (Stanley Kubrick,1971)



“Videa bien hermanito, videa bien”

La película se muestra como una explicita muestra de violencia a lo largo de todos sus minutos. Minutos de extrema violencia que por lo general fue prohibida su visionado total en tres países, en otros doce fue estrenada con escenas censuradas y en Inglaterra y USA fue denominada y calificada como X. En Inglaterra, la violencia sexual fue considerada extrema y excesiva. Tanto que a la Warner se le pidió que retirara la película de sus cines, cuando en un momento se encontró con muchísima presión incluso recibiendo amenazas de muerte ¡Brutal Kubrick, Brutal!

A mucha gente le encanta o le encantaría que después de muerto se hablen de ellos y los recuerden, bien o mal, da igual mientras hablen. Los buenos directores de cine tienen ese poder, serán recordados en la eternidad más remota por sus imágenes, guiones y escenas. Recordados por su controversia hacia el público o por su decencia detrás de las cámaras, sea lo que sea, bien o mal, recordados en el túnel paradigmático de la eternidad.

Con el paso de los años, la película fue considerada un film de culto, una estrella fugaz sin límite de brillantez, con lo cual es una estrella de brillo perpetuo, el metraje de una película que mejora como el buen vino tras ser videado unas cuantas veces. El instante de saborear el buen cine es el mismo placer que sale cuando saboreas el buen vino. Impresionante. Muchos críticos y aficionados consideran ya a la película como una de las películas jamás echas. Tu esfuerzo es reconocido Sr. Kubrick. Tras años vagando tu película por el túnel de la paradigmática eternidad, el sudor y el esfuerzo es reconocido. Gracias por tu cine, maestro. Gracias.

El título de la novela, "The Clockwork Orange" tiene su historia. “Orange” en ingles significa naranja, pero en realidad proviene de otra palabra “ourang” que significa persona, el autor de la novela, Anthony Burgess, realmente la novela la quiso llamar “El hombre mecánico”. Pero quiso hacer un juego de palabras refiriéndose a naranja, como a un cerebro. Que nuestro cerebro es mecánico y al final vuelve como al principio sin poder alterar su mecanismo. Torturar esa naranja seria como torturar nuestro cerebro. Torturar lo que nos puede hacer libres algún día. Esa manipulación del pensamiento tan desconcertante es, para mí, también un grado de extrema violencia hacia el pensamiento humano. Nos persiguen intentando jugar con nosotros, jugar con nuestra naranja. Pero no saben que el ser humano no es mecánico, si no humano, sobre todo humano, y no tiene límites nuestra mente. Nuestro jugo inundaría a cualquier persona que se oponga en nuestro camino.

El mecanismo complejo de nuestro cerebro necesita una buena llave para ser abierto y ser conocido al mundo. Así nos recordaran por toda la eternidad. Pero no se altera por mucho que busques como hacerlo. Es calmado según nuestro nivel de serenidad. Como a mí me gusta. Puedes tomar dos clases de decisiones en la vida, la correcta y la incorrecta. Puedes coger la decisión incorrecta y arrepentirte toda tu vida de no haber cogido la correcta. Quizás la correcta no sea tu mejor opción. No me importa si me recuerdan por lo que algún día hice bien o hice mal, recordadme sin más por lo que soy y un día no quise ser; por coger la opción incorrecta.

jueves, 1 de diciembre de 2011

Carrie (Brian De Palma,1976)


“¡Todos se van a reír de ti! ¡Todos se van a reír de ti!”

Últimamente el nombre de King se ha acomodado en mi cerebro. No le negare la estancia nunca. Reservado para el, el derecho de admisión. Rebota en las paredes de mi cráneo como si de un salvapantallas se tratase. Muchas novelas suyas han sido adaptada, bien o mal, para televisión o para cine, da igual pero es que el autor es un satélite orbitando en la imaginación y los directores son astros de otra galaxia, lo clavan con el rodaje y sobre todo, con la fotografía. Una buena fotografía sale porque hay una buena escena alrededor.

Cuando hay algo espectacular que contar con solo unos disparos de una cámara y ese entorno es el propicio para enseñar tu a la cámara y al objetivo quien es el que manda, quien es el que decide que en el momento oportuno, ese momento óptimo, salga la maravilla que quieres admirar el resto de tu vida, lo demás resta importancia, no existe, solo quieres volver a ver esa imagen de nuevo. Es lo más importante en ese mismo instante, que nada me haya jodido la foto, por dios.

Sissy Spacek, la actriz protagonista, aseguro al director en una entrevista que en esta escena donde la ducharon con sangre (supuestamente en el film fue sangre de cerdo pero en realidad fue un compuesto que hacen a base de maíz) que no la hubiera importado que fuera sangre real, si ya la iban a sangrar entera que por lo menos fuese real. Más fácil lo hubiera tenido después, al limpiarse, ya que con la sangre falsa se la seco tan rápido gracias a los potentes focos de calor, que se adhirió a la piel de tal manera que fue muy difícil limpiarla, hubo que ponerla en remojo para que la pasta se humedeciera y se convirtiera en una pasta pegajosa y frotar bien de horas.

Cuando hicieron la audición para el casting, Brian no tenía muy claro quién sería la actriz protagonista, dudaba entre Sissy y otra chica, pero fue aparecer Sissy vestida con un vestido que la hizo su madre en el sexto curso. Entonces una chispa en su cerebro le hizo una pequeña corriente alterna a lo cual un pequeño cortocircuito en los parpados, porque el chico no dejaba de parpadear. No por la belleza de la mujer con su vestido, que no lo dudo, fue porque se mostró tan torpe, sensible y tímida que no se lo pensó dos veces en darla el papel. Para el papel de Carrie era perfecta. La inocencia más pura dentro de la sensibilidad de una flor. Hermosa. El olor de una nube después de descargar una tormenta. Tenebrosa.

Carrie es algo sobrenatural, algo fuera de lo común, un extraño presentimiento. Oscuro. Sensaciones telequinéticas que atormentan su cabeza por la humillación que siente. Un entorno favorable para que salga de ella, desde lo más adentro de su corazón, la ira. Con la que mueve objetos, destruye ciudades enteras, castiga a los que un día se rieron de ella y marginaron. La Ira, con la que se alimenta su propia alma y su deseo de vengarse. La IRA, con la que enfada su cuerpo y desata su extrema violencia. LA IRA con la que mata, quema y reduce a pedazos personas inocentes. LA IRA y la FURIA dentro de una persona que es consciente del daño que la a echo su propia madre. LA IRA la ciega, la destruye, la mata por dentro, la oscurece el corazón. Solo ve negro. Los ojos del demonio totalmente abiertos. Llenos de IRA. 
Carrie no se controla y por lo tanto no es humana, no es persona porque lo que le hace grande a una persona no es tener muchos amigos, ser popular y jugar en el equipo de fútbol del colegio, si no es el poder que posee para controlarse. La persona fuerte no es el que supera a los demás por su fuerza, sino el que se controla en momentos de ira. Por ese motivo somos personas grandes que combatiremos contra grandes sensaciones destructivas. Mi propia ira no es más que la respuesta a la exageración más fuerte de un momento de frustración en mi carrera, la irritación y molestia de mi propia nube. Me falla el temple y pierdo los nervios, me inundo de cólera, corro de la realidad escondiéndome rápido entre mi sistema nervioso para que la rabia no me coja. No huyo, ni escapo. Solo deseo respirar en la tranquilidad de mi nube. En mi terreno no hay cólera que me inunda de tormenta. En mi nube no hay ni rayos ni truenos. Que tranquilidad, por dios. Que nadie me moleste. :)

lunes, 28 de noviembre de 2011

Cuenta conmigo (Rob Reiner, 1986)


“Nunca he vuelto a tener amigos como los que tuve cuanto tenía 12 años, dios mío, ¿Los tiene alguien?”

Se guardan, crecen y se valoran. Se guardan en lo más profundo de tu corazón, justo al ladito de los buenos recuerdos. Crecen, porque a nuestro lado se apoyan para poder subirnos una sonrisa en la boca. Y se valoran, como valoras un tesoro, y los buenos recuerdos son tesoros con un valor inimaginable, hoy por hoy, incalculable.


Otro éxito de King, otro destello de biografismo suyo y otra perla encantada que nos deja esta escena, quizás no la mejor, pero si la que a mi más me gusta, con una cierta similitud que tuve en mi infancia con mi familia y amigos, con un tren que intentaba ahogarnos el paso en el momento que decidimos cruzar las vías para sobrellevar una calurosa tarde de verano en las orillas del rio. Por suerte no hubo que lamentar nada.


A Stephen King se le murió un amigo de la infancia atropellado por un tren, en cierta manera esta es su obra. Su pequeño homenaje con la novela The body le hace guardar con la llave de su vida su amistad con ese chico, le hace crecer como persona, conocer nuevas personalidades y le hace valorar lo que un día tuvo y un tren se lo quito.
Una película que como protagonistas son cuatro amigos de doce años y viven un fin de semana lleno de aventuras antes de empezar, con mucha decepción, un nuevo curso escolar fue catalogada por primera vez en América con una calificación R ( en España digamos que es un –No recomendada para menores de 17 años). Los niños actores lo fliparon en colores, ¡¡No se creían que les permitieran rodar con un guion con tantos insultos hacia madres ficticias y fumar en algunas escenas!! Pero no se fueron muy lejos, el director, un activista antitabaco, insistió en que el tabaco de la película, un 100% American Blend, fuera un 100% hojas de col.


Cuenta conmigo, es una película muy grande y un reflejo clarísimo del valor de la amistad. Valorar en dos días una amistad que por la pedregosa vida se van a ir perdiendo y cayendo, nuevas caras entraran en nuestras vidas y muchas saldrán.

El valor de una amistad puede ser eterno. Sin principio, ni fin. Permanente. También a veces efímero. Pasajero. Pero eterno también. Mientras tanto, es eso lo que cuenta, la amistad vivida, por largo o corto tiempo, da igual. Eso no es preocupación. Estamos en la vida de paso. Hagamos que esto cuente. En vez de eso, hagamos un cuento de nuestra vida. Solo los mejores momentos vienen por si solos, no tiene sentido esperarlos, no adelantas nada, quizás lo retengas más y en estas cosas no es buena idea volver atrás. Guarda a un amigo bajo la llave de tu propia vida y el té enseñara a abrir sus propias puertas. Los que ponen trabas para poder abrirlas, quizás no merezcan ser los guardianes de tu llave, quizás no sea una buena idea seguir adelante con la idea de recuperar una amistad. Una pena ya que viejas caras saldrán de tu vida pero otras nuevas más gratificantes entraran en ella, dale la llave de tu corazón a quien de verdad merezca ser su guardián, solo así te salvaras de vivir en un perecedero círculo de amistad falso y transparente. Una amistad perecedera. Perenne. Pasajera. Pero a fin de cuentas, cargadito en tu corazón de recuerdos eternos.

viernes, 25 de noviembre de 2011

El resplandor (Stanley Kubrick, 1980)



“No voy a hacerte daño Wendy, solo voy a arrancarte tu jodida cabeza”

El resplandor es un fenómeno. Es la capacidad que tienen dos personas cuando son capaces de hablar de un tema entrelazándolo con otro, la capacidad de hablar sin pausar los labios ni una sola vez. La sensación de resplandecer con las palabras al sujeto y de abordar frases sin pausa, eso es el resplandor. El resplandor de Kubrick es diferente, es una capsula perturbadora en la mente de un sujeto. La locura, el ansia y una mente con un laberinto intrincado en su cabeza.

Sin ir más lejos en la escena del laberinto, la maqueta de este,  tiene numeroso pasillos, pero cuando Jack observa a su familia caminar, se ha vuelto mucho más lioso y agónico. Es cuando sabemos que Danny y Wendy son potencialmente víctimas de la mente perturbadora de Jack.

La novela, que la escribió un mesías de la palabra, Stephen King, está basado directamente en su persona, en cierta manera es su biografía. Sobre un escritor que sufre de insomnio y no contento con la escritura se sumerge en el alcoholismo en el que King desgraciadamente también sumergido sufrió una gran temporada. Las palabras se borran con el alcohol y nubla las ideas. No fue buena idea.

Curiosamente, el final de esta misma escena, donde dice: “Aquí esta Jack”  fue repetida nada más que 157 veces, se convertiría sin duda en una de las escenas más repetidas de la historia del cine. No sé qué puede haber de complicado en esa frase. Si sale sin querer, y con la cara de jodido loco de Jack tiene media escena echa. Quizás sea aun peor la mente de un director que creyó en ayudar a la actriz protagonista insultándola y maltratándola psicológicamente durante el rodaje, lo que la llevo a sentirse insegura y temerosa, tal cual la vemos en la película. Malos métodos con un resultado insuperable.

Cuesta a veces mantener la cordura. Recorrer los pasillos de tu mente, girando en cada apertura hacia un nuevo pasillo y este mismo, te muestra más salidas diferentes, como en un laberinto. Y es que ¿Por qué la mente, lleno de ideas y temores, no puede ser un recto pasillo? Decorado con nuestras paredes y suelos, poner nuestros cuadros, láminas o esculturas al gusto. Subiendo y bajando, caminando por nuestro corredor conocido. ¿A caso no podemos crearlo desde cero? Si, por supuesto que si, pero entonces ya no sería un laberinto. La abrumadora tranquilidad y a la vez perturbadora belleza de nuestro laberinto propio. El poder de buscar o decidir algo en tu pasillo nos hace felices y nos encanta poder volver a buscar nuevas incógnitas, nuevos retos. Nos hace falta la  necesidad de poseer nuestro tiempo hasta encontrarlo y dar con la respuesta exacta, siempre que sea la correcta, a veces pasa, que te pierdes en tu propio laberinto, como en un museo. Y es que hay mentes y mentes. Unos laberintos más complicados que otros. Sea como sea el vuestro, lo importante es tener bien amueblado el pasillo de arriba para enfrentarte, sin temor y con la aspiración de nuevos retos, con el pasillo de aquí abajo.

miércoles, 23 de noviembre de 2011

Tiburón (Steven Spielberg, 1975)



Necesitara un barco más grande”.

Me levanto de la arena. Sudando. -Que calor. Toque lo que toque y pise lo que pise, quema. Ardo. Sudo y ardo. Extraña combinación.- Necesito un baño. Ando y me acerco a la orilla. El sol pega y en la playa no hay nadie. Vacía la playa y vacío el cielo. Levanto la mano y me la acerco a los ojos. El sol me quema la mirada. Me ciega. Intento observar. –Una mancha. Se mueve rápido, de un lado a otro. Nervioso. Intranquilo  – ¿Qué es? Sea lo que sea, tiene prisa. –Malo. El temor a no saberlo hace que me recorra escalofríos. Es miedo. Se me estira la piel. Huele el temor. Se acerca cada vez más deprisa. Llega a la orilla. Húmedo. Sin casi fuerzas. Recobra el aliento –Hola, soy Steven, la toalla. Quieres darme esa toalla de una vez. Mi cara de miedo, de temor, es un hilarante emoticono. No se que seria peor.

Y es que Spielberg llego a las taquillas como si de un escualo se tratase, arrasando con todo el país. Recaudo más 471 mil dólares con un presupuesto inicial de 12 mil con tiburón. Impresionante taquilla. Metiéndonos el miedo entre cada centímetro de nuestra piel. Después del estreno de la película la afluencia en las playas cayo a nivel mundial, la gente aseguraba ver tiburones mientras nadaba. Lo que hace el cine. Me encanta el poder que tiene de manipular las mentes. Ven “Tiburón” y la gente se caga. Ven “Viven” y se lo piensan en coger un avión. Hombre, no me gustaría que me comiesen.
Esta sería una de las últimas películas donde se utilizó un animal mecánico, reavivando el realismo, y es que los cientos de problemas mecánicos que tubo desesperaron a la producción. Después de esto los incesantes efectos especiales hechos por ordenador gobernaron en el imperio de Hollywood. Al tiburón mecánico en cuestión le bautizo como Bruce, el mismo nombre que el abogado de Spielberg. Cachondo el tío Spielberg, me encanta. Era notablemente más grande que los tiburones verdaderos, se confundiría con un Megalodon, un tiburón extinto joven.

 Una vez, en el estreno de la película, estaba Spielberg en el hall del cine, salió una persona de la sala y se arrodillo cerca de él, vomitando. Él pensó “La hice demasiado violenta, mierda, que voy hacer”, pero luego esa persona se fue al baño y volvió  a la sala y entonces pensó “Es un éxito”. Y es que a la gente le gusta tanto el realismo, que si le pasaran a ellos, tendría que ser perfecto, nunca más real, fijándose en parámetros del cine. Como dijo Steve Jobs, la gente no sabe lo que quiere hasta que se lo muestras.
Y es que imaginaos a vosotros que estáis viendo una película con 13 años, vuestra, de toda vuestra vida, el impacto que esto haría en vosotros seria brutal, a veces traumático. Eso, por suerte, aun no es posible, pero no tentemos a la suerte. Tenemos el poder de imaginarlo, pero no de verlo. El poder de la imaginación es mucho más grande, es un océano de ideas. Cada uno tiene su proyección y su momento estelar, el gobernar un país o vivir de ilusiones. Eso es más importante, en vez de ver, crear. Desde cero. Una oportunidad única en nuestras vidas. Una oportunidad tan grande como nosotros queramos que sea nuestras vidas. Tenéis que crear un océano. Yo estoy en ello. De momento he quitado a todos los tiburones de mi océano.

lunes, 21 de noviembre de 2011

El padrino ( Francis Ford Coppola, 1972)


“Abusaron de mi hija, la emborracharon y la violaron. A los dos chicos les soltaron esa misma semana, y se rieron de mí, en mis narices, entonces pensé,  la justicia nos la hará Vito Corleone. “

Mi numero uno, mi película, mis cannalonis de carne, mi banda sonora, mi familia, mi vendetta personal, mis spaghetti con albóndigas. Me encanta, me gusta y me seduce. Me dejo seducir al saber la implicación que tienen con La Familia. Porque "un hombre que no tiene familia, no es un hombre".

Las escenas fueron rodadas en Long Island donde curiosamente sus vecinos se negaron a participar en el rodaje porque pensaban que la película glorificaba a la Mafia. Cuando salió el anuncio del rodaje de El Padrino la agitación y polémica por parte de una rama de  los Derechos Civiles de los Italoamericanos, acabo en amenazas de paquetes bomba hacia el grupo de producción de la película. Menos mal que gracias a las reuniones se calmaron los humos e incluso les convencieron para que aparecieran en la película, si no más de uno dormirían con los peces.
La mafia nació en Sicilia, y pensar que la culpa de eso la tiene unos árboles frutales. Un árbol, cuanto menos hermoso, que cuando nace solo piensa en crecer para así deslumbrar con sus ramas llenas de colores y frutos pesados llenos de ácido jugo, pues así veo yo a la Mafia. La veo como los frutos de un naranjo o un limonero.

Y es que hablar de El Padrino son  palabras mayores. Es el lado más complejo, perturbador y romántico de la Cosa Nostra. Es una cosa nuestra, es nuestra espina como sicilianos, nuestro sentimiento de ejecutar cualquier acto con tal de defender a la Familia. Nosotros seremos capaces de cualquier cosa si nos tocan lo nuestro. En algunos casos, muchos de nosotros actuamos como la Mafia. Tenemos cierta similitud. No hablo de negocios. Hablo de poder.El que tiene nuestras raíces. Sabemos cuál es nuestro Capo di tutti capi. Le ayudamos y protegemos con nuestros intereses ante cualquier cosa, después de todo es nuestra Familia. A mis familiares, hermanos y mis amigos; Benvenuto alla mia famiglia.

Mis intereses son vuestros intereses; mi venganza es la vuestra; mi destino el de mi Familia; mis negocios, el futuro; mi rabia, la mano ejecutora; mi sentimiento, el de mi debil corazón; mi cariño, es el vuestro; mi familia, sois vosotros.


jueves, 17 de noviembre de 2011

El Golpe (George Roy Hill,1973)



Un lujazo de película y de ambiente en los años 30, nada más y nada menos que ganadora de 7 Oscar, eso para la época es algo histórico, un hito filmográfico, una piedra preciosa guardada en cajas metálicas redondas. El señor Cameron hizo otro milagro peliculero con 11 en Titanic, pero la dificultad del 1973 no es la misma que la de 1997, sobre todo cuando media película se hace por ordenador.

Esta película lo tiene todo: Una banda sonora inolvidable, interpretaciones espectaculares, Newman y Redford implacables, un argumento que engancha, un guion que puede ser el mejor jamás escrito nunca….y un sinfín de cosas.


Tengo cierta atracción por los timadores, la verdad sea dicha, aunque engañar o mentir puede ser delito en algunos casos, tienen un cierto encanto y por supuesto una cierta preparación y estudio del proyecto y del primo. Además, engañar o timar con una buena sonrisa esta bien visto por el cine, sino, mirad todas las películas de timadores y estafadores que hay echas y todas acaban bien, se llevan el botín y lo disfrutan, y quien queda como los malos y los tontos: la policía. Si es que Hollywood tiene una clase ¡!. Antes de ver las películas tienes un grado medio sobre el engaño, cuando te las ves todas tienes una diplomatura en el timo y la estafa.

Esta película echó una partida de póker, vio que tenía cartas y fue a por todo. El resultado, una película excelente.  De póker de ases, que nos deja muchas escenas bonitas, pero esta, en concreto me gusta, mucho no, demasiado. Aparte de la brillante interpretación de Newman, me gusta observar como en la jungla de naipes, donde el plástico adquiere valor monetario, son los timadores los que son timados y engañados, me encanta cuando tienen un plan buenísimo, un plan para cambiarlo todo y hacer que la suerte forzosamente vuelvan a ellos, haciendo trampas por supuesto, pero luego se dan cuenta de que hagas lo que hagas siempre habrá un plan mejor que el tuyo. Y es que la vida, ¿Por que no puede ser como una partida de póker?, vale, hay que tener un poco de fortuna en la vida, pero es que así nos preguntaríamos si de verdad merece arriesgarse en algunas cosas.

Jugaría un mano a mano con mi destino. Ante mi cara de póker no tiene nada que hacer. No tengo buenas cartas, pero pienso que saldrán mejores. Lo pienso. Estoy nervioso y se me nota. Mierda. Pido cartas. Dos. Lo pienso otra vez.  As, Rey. Buenas cartas. Me palpita el corazón. Recuerda. Cara de póker.  Apuesto con lo único que tengo, mi conciencia. Lo pienso. ¿Qué cartas tendrá mi destino?  Ni lo sé. Ni mi importa. Sé que mi destino tiene una buena jugada y yo también. Pero yo mando sobre él. Saque lo que saque, mi destino tiene un buen plan, pero el mío es infinitamente mejor. Siempre hay un plan mejor. El mio. Es el mejor plan para mi vida, por que yo se hacer mejores trampas.


miércoles, 16 de noviembre de 2011

Los pájaros (Alfred Hitchcock,1963)

Como dijo el director en su día, es una película interpretada por pájaros con algún que otro humano.
La actriz protagonista vivió un verdadero infierno rodando junto a Hitchcock, el incesante acoso del director hacia ella provoco que saltaran mas que chispas en el rodaje. Una vez la acoso pensando que ella estaba enamorado de el, y no era así. Estaba obsesionado con ella!!! Era tal el control y la obsesión que la amenazo con acabar con su carrera como actriz, y esque, casi siempre, estar al mando del Maestro del suspense fue muy difícil.
El final original de la película puede ser el mas aterrador que haya salido de la mente del Maestro. La familia huye de los pájaros y se dirigen a San Francisco, aliviados y esperanzados, hasta ver que en los edificios y en el puente Golden Gate están repletos de pájaros dispuestos a a atacar, imaginaros la escena. Es una pena enorme, seria el mejor final que se podía esperar, el mejor final que podría haber existido. Por problemas económicos no se pudo llevar a cabo. Se esta rodando un remake, espero que se añada esta escena original de 1963 en la película.
Y pensándolo bien, estos tiernos animales, preciosos con su abrigo de plumas, libres por naturaleza, están hartos. Hartos !!! Hasta la coronilla plumosa de ser disparados, disecados y enjaulados, cuando ellos no hacen ningún mal. Que han hecho? Son las ganas de jugar de los humanos con juguetes voladores vivos. La pena de dominarlo todo, dominar el cielo y sus especies. Pero cuidado, nos superan en número, son muchos mas que nosotros y tienen mala uva, están cabreados y los hay grandes...muy grandes.
Cuando en la tierra también estamos luchando y en rebelión, indignados y cabreados por la condición de vivir dignamente, me uniría a vosotros por vuestra injusticia sin dudarlo. Pero al acabar, me tendríais que matar, sacarme los ojos y acabar conmigo. Yo como todos, con sus problemas, temores y con sus errores. Después de todo soy humano. Sobretodo humano. Human after all.

lunes, 14 de noviembre de 2011

Poltergeist (Tobe Hooper,1982)

Si el miedo supiera lo que hace con nosotros, tendría vergüenza de si mismo por que cada vez que miras una película de terror, el miedo se mete en tu cuerpo y se apodera de todos tus nervios y tu mente, los músculos se te encogen y acto seguido se refleja en tu cara la mueca mas aterradora y asustada. He podido ver películas de terror que me han dejado tal mal cuerpo que no me han dejado ni comer. Esta película no es el caso.
Este es un reconocimiento especial a la mas devastadora de las películas malditas de toda la historia del cine de terror, cuatro muertes extrañas en sus tres películas entre ellas la de la inocente niña protagonista Heather a los doce años por una complicación intestinal y el brutal asesinato de la hija adolescente a manos de su pareja. 
Maldito terror!!! y Terror maldito. La maldición se apodero de la película al utilizar esqueletos humanos reales. A quien se le ocurre !!!
Cosas de Spielberg, que a pesar de no ser el director no se separo de la sombra de Hooper al rodarla y decirle como lo tenia que hacer todo. Digamos que es una peli de Spielberg rodada por Hooper con la cansina ayuda de Spielberg. Me imagino al señor Spielberg en la cama con Hooper y su mujer diciendo: -Así no Hombre, así no. Trae anda, déjame a mi, que si no, no acabamos.
Y quien no, cada vez que ve "nieve" en el televisor se acuerda de la niña y se dice un -Ya están aquí !!! con la mejor y dulce cara que uno pueda poner, aunque a veces eso sea imposible. Recuerdo que una amiga, me envió la parte final de este vídeo refiriéndose a una maldita oleada gafapastosa, es otra forma de recordar el film.
Digáis lo que digáis los espíritus existen y se pueden comunicar de una forma u otra, depende de lo que tu hagas. Son los únicos que pueden ver todo lo que haces, si haces el bien, todo seguirá según el curso de tu vida, si haces el mal, son ellos quien harán de tu vida una pesadilla, esto paso con esta película la maldición se apodero del rodaje como se apodera de un alma en cuestión de días o semanas. Esa alma, si esta limpia derrotaría al mal con solo mirarla a los ojos por que la mejor manera de acabar con el miedo es enfrentándose a el. Así que ya sabéis. Sed buenos.
Gracias a la colaboración de Sandra, por enviarme esta petición y a Diana por ayudarme en esta preciosa labor.

jueves, 10 de noviembre de 2011

It, Eso (Tomy Lee Wallce, 1990)

Una gran película salida de un gran libro casi siempre acaba en buen resultado. Esta es del Best Seller de Stephen King, un telefilm solo estrenado en televisión que recomiendo encarecidamente a aquellos que os gusten las novelas de Stephen King y seáis amantes del cine de terror como yo.
Es una película de 3 horazas sin violencia, lo único violento es ver el sarro en los dientes del payaso Pennywise.
Se aparece casi de la misma manera que el legendario Freddy Krueger, en sueños y alucinaciones y aprovechando la soledad de sus victimas.
Es un ser de otro mundo que cambia de forma y aspecto capaz de leer mentes y miedos, listo para alimentarse de seres vivos, preferiblemente niños.
Para mi esta es una escena donde me recorrer escalofríos, por la inocencia de los planos y que sabes que va a pasar algo malo pero no sabes el que, no te lo esperas. Se te encoge el alma y se te estira la piel de los brazos.
El pobre Georgi camina tras su barquito echo de papel sin saber que le deparara cuando su barco naufrague en la cloaca y que el mismo mal emerge de allí. Nada bueno trama Pennywise en una cloaca, como Paquirrin en su noche de boda. Nada bueno.
Me encantan los payasos terroríficos mas que los vampiros, zombies o psicópatas los que me dan realmente miedo son los payasos de verdad, nunca se lo que insinúan cuando se quedan mirándote esperando como si algo fuera gracioso, se me corta la sangre solo de imaginármelos y aun no me queda muy claro lo que habrá debajo de esos zapatones enormes.

King Kong (Merian Cooper y Ernest Schoedsack,1933)

Quizas una de las escenas mas famosas de la historia del cine.Creado con la básica tecnología de aquellos maravillosos años en Hollywood de adaptación y preparación de equipos en la industria del cine.
Primeramente fue llamada La octaba maravilla, inspirando a generaciones de directores y productores de cine.En el 2004 fue clasificada como la mejor película de monstruos de todos los tiempos.
El cine de monstruos se caracteriza por desatar a un animal de dimensiones gigantescas en las ciudades y a la vez desatar una furia de destrucción masiva que hace de tu ciudad natal un camino mortal hacia el caos. Me lo podría imaginar en Burgos, pero en vez de subirse al Empire State se subiría a la catedral y sobre todo con otro corte de pelo mas casual.

Venido desde Isla Calavera para exhibirlo en publico contra su voluntad hasta que encontró el amor de Ann. Podrías pensar que el amor no puede acabar con nadie, si puede, en este caso la victima fue el pobre y enamorado King Kong.

La tentación vive arriba (Billy Wilder,1955)



La escena fue rodada dos veces,la primera en una avenida de Manhatan y la segunda en el estudio, se escogió la segunda ya que la primera fue inservible por el ruido de la gente que veía la grabación. La Monroe, dulce, inocente y símbolo sexual de todos los tiempos apareció en el numero 1 de playboy en el 53 con una foto histórica encima de una sabana roja.
Estrella estrellada a causa de una sobredosis de barbitúricos o asesinada.  Las pruebas indican que lo segundo. Relacionada con los hermanos Kennedy habían compartido secretos nacionales en la alcoba y amenazo con hablar por haberla tratado como un trozo de carne, ¿tratarla como un trozo de carne?, ¡Por dios!.  Cuando en el universo no hay nada mas bello que se le parezca lo mas mínimo a una mujer, por muchas estrellas o pulsares complejos que haya.
Se cometen errores en la vida y así aprendemos de ellos, para ella ya nada va a valer la pena, para mi, la pena es no poder visto a una bella estrella envejecer por juntarse con quien no debía.